Municipios en los que se ha realizado alguna repoblación:
· Portilla, paraje Las Fuentecillas.
· Villar del Saz de Arcas, El Pozo.
· Villar del Saz de Arcas, integración punto limpio.
· Fuentes, Las Zomas.
· Villar de Olalla, La Abengózar.
· Cuenca, Fuente del Canto.
· Sotos, paraje La Mata.
· Valdemeca, proyecto “Pon un árbol en tu vida”.
· Beamud, integración punto limpio.
· Beamud, acondicionamiento perimetral merendero.
· Vega del Codorno, parcela privada.
· Nohales, repoblación en la Cañada Real.
Excavar un hoyo de tamaño proporcional al de la planta, teniendo en cuenta que es conveniente que tanto en los laterales como bajo las raices quede tierra suelta, para que éstas puedan desarrollarse mejor.
De la tierra que hemos extraído dejaremos caer un poco de la más fértil (superficial) en el fondo del hoyo.
Colocar la planta vertical y bien centrada dentro del agujero. El hoyo se rellenará de la tierra más fértil hasta que el tallo de la planta quede a nivel con el terreno. Con una mano sujetaremos la planta para que permanezca bien colocada y con la otra, rellenaremos con cuidado el hoyo de tierra.
Una vez hemos rellenado el agujero con tierra, la pisaremos fuertemente alrededor de la planta, con cuidado de no dañar ésta, de tal forma que el suelo quede bien compactado.
Después de plantar es conveniente realizar un alcorque alrededor de la planta para facilitar el riego.
Si el terreno es inclinado, podemos hacer un alcorque bajo la planta en forma de media luna, así recogerá el agua de lluvia.
Por último, se colocará el protector con la parte biselada hacia arriba, clavando la varilla en el suelo con firmeza y fijándola con la brida al tubo.